Sobre las pérdidas de nuestros amigos animales

Durante mi período universitario estuve un tiempo haciendo prácticas curriculares en un centro de apoyo a personas con autismo y entre las actividades que se desempeñaron una actividad consistía en llevar a animales a trabajar con los niños.

Me encantó la forma en la que los niños se desenvolvían con los animales y me maravilló el aspecto de cómo a pesar de las características particulares de cada niño todos conectaban de alguna manera con algún animal, de manera muy personal yo conecto con los animales porque siento que nuestra relación puede enriquecer de múltiples maneras tanto a los animales como a nosotros. 

Habiendo mencionado esto como introducción, me gustaría preguntar si los animales tienen ese poder de conecta más allá de las diferencias ¿Cómo no sería posible el sentir un cariño grande por estos seres? Y más, si nos hacen compañía en el día a día. Investigando un poco más acerca de nuestra interacción con los animales domésticos hay muchos procesos que se ven influenciados dentro de nuestra interacción con ellos, entre esos aspectos  que puede brindarnos mucha estructura y acompañamiento, no importando el tipo de animal que sea, tener en cuenta los cuidados que conllevan y haciéndolos parte de nuestra rutina, es completamente lógico que nos sintamos menos solos al tener esta presencia.

Y así como también pueden aportar beneficios, como mantenernos activos, el abrirnos a nuevas actividades que no consideramos antes, claro que vamos a sentir aquella ausencia, si en algún momento nos falta. Y ESTA BIEN, ESTA BIEN SENTIR, (considero que esto puede llegar a sonar cliché, pero en la práctica, a veces, es todo un asunto diferente, jaja) está bien el sentir tristeza, está bien el tomarnos un momento para evaluar cómo lidiaremos con la situación, de qué manera llevaremos esas presencias en nuestra vida, cómo las honraremos. 

Tuve una perrita antes de mis revoltosas tres, y recuerdo, siendo más chica que cruzó por mi mente el pensamiento “¿Por qué duele tanto su pérdida? Era solo una perrita” Y me recuerdo una frase del Principito:” Fue el tiempo que le dedicaste a tu rosa lo que la hizo tan importante” Los cuidados, la compañía y las características particulares de nuestras mascotas queridas merecen el darles un espacio también, darle importancia y validez. Démonos un momento para asimilar las pérdidas, démonos un momento para honrarlas de la manera más significativa posible dentro de nuestras posibilidades.

- Psic. Jessy Sánchez

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